De acuerdo con Paul Valdés Cervantes, director de la encuestadora Parámetro, tras el periodo de campaña que llega a su fin, se realizó un ejercicio de medición que refleja un crecimiento sustancial en el número de personas que ya identifican la fecha de los comicios y manifiestan su intención de acudir a las urnas.
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Detalla que en el mes de abril preveían que solamente el 12% de la población conocía la fecha de la elección. Hoy, ese porcentaje ha crecido hasta alcanzar el 50%, lo que habla de una mejora en la difusión institucional, pero también de un despertar ciudadano.
El estudio también muestra que, aunque se partía de un pronóstico pesimista de participación que oscilaba entre el 8% y el 17% similar a ejercicios como la revocación de mandato, las condiciones actuales permiten estimar que el 20% del padrón nacional acudirá a votar.
Esto representaría una movilización de aproximadamente 20 millones de personas, una cifra inédita tratándose de una elección exclusivamente judicial.
“Es una cifra significativa, sobre todo si consideramos que cargos como los de ministras y ministros de la Suprema Corte podrían acumular entre 9 y 12 millones de votos, algo sin precedente”, destacó
No obstante, el entusiasmo electoral contrasta con un contexto marcado por la desinformación y las restricciones.
Detalla que el número de candidatos es tan amplio en promedio, cada votante deberá elegir a cerca de 50 aspirantes para distintos cargos que el proceso se vuelve casi inabarcable para el ciudadano promedio.
