El fruto seco que combate el insomnio y protege la salud cognitiva
El pistacho, como otros frutos secos, destaca por su perfil nutricional que contribuye al bienestar general y, en especial, a la salud cerebral. Su riqueza en melatonina, una hormona clave en la regulación del sueño, lo convierte en una excelente opción para combatir el insomnio. Consumir una porción de pistachos —aproximadamente 30 gramos— aporta unos 6 mg de melatonina, lo cual ayuda a establecer un ritmo de sueño saludable, algo vital para quienes buscan mejorar su descanso nocturno de forma natural, según la Fundación Española de Nutrición (FEN)
Además de su efecto sobre el sueño, el pistacho es valioso para la salud cognitiva. Este fruto seco contiene luteína y zeaxantina, dos carotenoides que se encuentran en concentraciones importantes en el cerebro y la retina. Ambas sustancias ayudan a proteger las células cerebrales del daño oxidativo, combatiendo el envejecimiento prematuro de estas y mejorando la capacidad de retención y la agudeza visual. A esto se suman sus antioxidantes flavonoides, que contribuyen a reducir la inflamación y protegen contra el deterioro cognitivo, reduciendo el riesgo de enfermedades neurodegenerativas.
El pistacho se caracteriza por su abundancia de minerales, entre los que destacan el potasio, el magnesio, el fósforo, el hierro y el zinc. Esta combinación resulta esencial para fortalecer la memoria y la capacidad de concentración, además de reducir los niveles de estrés y mejorar el estado de ánimo. Su contenido en vitamina E, otro antioxidante poderoso, es también fundamental para el bienestar cerebral y la prevención del deterioro celular, además de ser beneficioso para la piel y el sistema inmunológico.
Sí, el pistacho es un excelente aliado para la salud del corazón. Su contenido en grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas ayuda a reducir los niveles de colesterol “malo” (LDL), favoreciendo la salud arterial. Además, el hierro presente en este fruto seco apoya la oxigenación de la sangre, mientras que el potasio y el magnesio ayudan a regular la presión arterial y previenen problemas cardiovasculares.
Incorporar pistachos en la dieta diaria no solo beneficia la memoria y el sueño, sino también el tránsito intestinal y la salud ósea. La fibra de los pistachos favorece una digestión saludable, mientras que su contenido en calcio y fósforo fortalece los huesos, previniendo enfermedades como la osteoporosis. Para aprovechar al máximo sus beneficios, se recomienda consumir pistachos con moderación, manteniendo una ingesta equilibrada.
