¿Cómo afecta la Luna Menguante en las personas? Momento de cerrar ciclos y avanzar
La Luna, con su ciclo de 28 días, influye poderosamente en nuestras emociones y decisiones, ¡Es verdad! De acuerdo con la astrología, la fase de la Luna menguante se convierte en una etapa crucial para dejar atrás lo que ya no nos sirve. Esta etapa nos invita a reflexionar, cerrar ciclos y liberar todo lo que nos pesa.
Las civilizaciones antiguas veneraban la Luna, reconociendo su poder sobre los ciclos de la vida. Su influencia se extiende no solo a nuestras emociones, sino también a los ciclos naturales de plantas y mares, gracias a su atracción gravitatoria y la luz que refleja.
¡Cuidado con la Luna Menguante! Ha llegado el momento de cerrar ciclos
A diferencia de la Luna Llena, que saca a la luz nuestras emociones reprimidas, la Luna Menguante nos anima a volver al interior. Es un tiempo para cuidar de nosotros mismos, organizar nuestras vidas y reconectar con la naturaleza. Este ciclo nos permite avanzar hacia el autoconocimiento y el éxito personal.
La astrología explica que durante estos siete días, es ideal despedirse de relaciones, hábitos o situaciones que ya no aportan creatividad ni amor a nuestras vidas. Es un tiempo para cerrar ciclos y permitir que nuevos comienzos se asomen en el horizonte.
¿Qué impacto tiene la Luna Menguante en las personas?
Con la llegada de la Luna menguante, la energía se transforma en un llamado a la liberación. Este ciclo no solo nos conecta con el cosmos, sino que también resuena profundamente en nuestra vida cotidiana.
Cada signo zodiacal también influye en cómo experimentamos esta fase lunar: en Aries, podemos sentir tensión; en Tauro, buscamos estabilidad; en Géminis, se intensifica la necesidad de comunicarnos; y en Cáncer, anhelamos estar en casa.
¡Cierra, suelta y renueva!
Este es el momento perfecto para evaluar lo que realmente deseas en tu vida y hacer espacio para lo nuevo. La Luna menguante es un recordatorio de que a veces es necesario dejar ir para poder avanzar. ¡Prepárate coas buenas están por venir!