El Parque Arqueológico de Pompeya limita su número de visitantes diarios
A partir del 15 de noviembre, el Parque Arqueológico de Pompeya implementará una nueva normativa que incluirá entradas personalizadas con el nombre de cada visitante, según informó el viernes el propio parque. Además, durante la temporada alta, que va del 1 de abril al 31 de octubre, se asignará a los turistas una franja horaria específica para su visita.
Esta medida se introduce después de un verano récord en el que más de 4 millones de personas visitaron Pompeya, con picos de hasta 36,000 visitantes en el día más concurrido. Según Gabriel Zuchtriegel, director del parque, esta iniciativa forma parte de un esfuerzo mayor para reducir la presión sobre el sitio, lo que podría poner en riesgo tanto la seguridad de los visitantes como la conservación del patrimonio, especialmente en situaciones de emergencia como un posible terremoto.
El objetivo es crear una experiencia turística más pausada, sostenible y menos masificada, permitiendo que los visitantes disfruten del lugar sin los inconvenientes que genera la alta afluencia.
Pompeya, que fue sepultada por la erupción del Vesubio en el año 79 d.C., ha sido uno de los destinos más visitados del mundo. La ceniza volcánica preservó la ciudad y a sus habitantes, convirtiéndola en un testimonio fascinante de la tragedia. Sin embargo, el aumento de turistas, que pasó de menos de 2,7 millones en 2014 a más de 3,9 millones en 2019, ha comenzado a generar problemas de sobrecarga.
Para mitigar esta presión, las autoridades han lanzado el proyecto “Grande Pompei”, que busca distribuir a los visitantes entre otras zonas cercanas, como las villas de Boscoreale, Oplontis y Stabiae, además de la propia Pompeya. El proyecto propone un modelo de parque arqueológico disperso, que incluye transporte y entradas combinadas, con el fin de mejorar la experiencia y proteger el legado histórico.