Gastronomía

¿Por qué comer sandía es beneficioso para la salud? 5 datos poco conocidos

Refrescante, nutritiva y deliciosa, la sandía es una de las frutas más apreciadas durante el calor, aunque también se puede encontrar en las góndolas durante épocas más frías. Más allá de su sabor dulce, la sandía ofrece numerosos beneficios para la salud gracias a su abundante contenido de nutrientes. No solo ayuda a mantener un estilo de vida saludable, sino que también puede contribuir a la pérdida de peso.

La sandía, cuyo nombre científico es Citrullus lanatus, pertenece a la familia de las cucurbitáceas y proviene de la planta trepadora conocida como sandiera. Esta fruta milenaria tiene sus orígenes en el África tropical, y su cultivo se remonta a unos 3,500 años en el valle del Nilo, como lo demuestran jeroglíficos y esculturas del antiguo Egipto. Los árabes eran grandes consumidores de sandía, y fueron los europeos quienes la llevaron a América, donde su cultivo se extendió ampliamente.

Según la dietista Lara Whitson de la Clínica Cleveland en Estados Unidos, la sandía es una opción saludable para incluir en la dieta. “Es baja en calorías, te mantiene hidratado y proporciona muchos nutrientes que pueden ayudarte a mantener una buena salud”, explicó Whitson.

Beneficios de la Sandía

1. Ideal para Bajar de Peso:
La sandía es excelente para una dieta debido a su bajo contenido de calorías y grasas. Un estudio publicado en la revista Nutrients en 2022 reveló que esta fruta es beneficiosa para una alimentación equilibrada y para la salud del corazón. La investigación, basada en datos de la Encuesta Nacional de Salud de Estados Unidos (NHANES), mostró que las personas que incluían sandía en una dieta baja en calorías obtenían mejores resultados en la pérdida de peso y aumentaban la ingesta de nutrientes como las vitaminas A y C.

2. Perfecta para Hidratarse:
Con un contenido de 95% de agua, la sandía es ideal para mantener el cuerpo hidratado, especialmente en verano. Una rodaja de sandía aporta alrededor de 150 ml de agua, ayudando a alcanzar la ingesta diaria recomendada de líquidos. La European Hydration Institute (EHI) señala que consumir sandía, ya sea en su forma natural o en jugos, es una excelente manera de mantenerse hidratado para quienes encuentran difícil beber agua corriente.

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3. Refuerza el Sistema Inmunológico:
La sandía es rica en vitamina C, esencial para el desarrollo de glóbulos blancos y el fortalecimiento del sistema inmunológico. Además, contiene vitamina A, beneficiosa para la piel y las mucosas, y luteína, que protege la visión de los rayos solares. La L-citrulina presente en la parte blanca de la corteza es buena para el corazón y los músculos, haciendo de la sandía una opción ideal para consumir después del ejercicio físico y para controlar la hipertensión.

4. Fuente de Potasio:
Con 170 miligramos de potasio por cada 100 gramos, la sandía apoya la función nerviosa y muscular, y ayuda a mantener el equilibrio de líquidos en el cuerpo. También posee antioxidantes como el licopeno y la cucurbitacina E, que pueden proteger contra enfermedades como el cáncer y la diabetes. La cantidad moderada de potasio en la sandía la hace apta para personas con insuficiencia renal.

5. Mejora la Salud Ósea:
El licopeno, que da a la sandía su color rojizo, es fundamental para la salud ósea. Este nutriente reduce el estrés oxidativo y disminuye la actividad de los osteoblastos y osteoclastos, células óseas involucradas en la osteoporosis, beneficiando así la salud de los huesos.

Incorporar sandía en tu dieta no solo te ayudará a disfrutar de su delicioso sabor, sino que también te proporcionará numerosos beneficios para la salud.

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