Los rituales para cumplir metas este 2024
Esta noche será común ver entre la mayoría de los ciudadanos la realización de rituales que les permita atraer “buenas vibras” y sobre todo positivismo para el cumplimiento de las metas o los propósitos tradicionales de todo inicio de año.
Actos después de la última campanada de las 12 de la noche que anuncia el comienzo del nuevo año como colgarse una llave con un cordón verde para que llegue el auto de tus sueños, sembrar siete lentejas para atraer la abundancia o pedir los deseos cuando se comen las uvas.
Nos hemos enfrentado a los famosos propósitos de Año Nuevo. Llega la cena de nochevieja y dan las 12:00 en el reloj, marcando el momento de desear todo lo que queremos lograr en 2024; sin embargo, conforme pasan los meses, los vamos postergando más y cada vez más.
Hay quienes sí los cumplen, comparten sus metas, historias de jóvenes que acuden a gimnasios principalmente para mantenerse en óptima forma física y que se proponen mantener el hábito todo el año, mientras otras personas se desaniman al reflexionar sobre sus objetivos a lo largo del año.
Esto es más común de lo que se pudiera pensar, según un estudio de la Universidad de Scranton, citado por la UNAM, el 73 por ciento de la población trata de cumplir sus metas la primera semana del año.
Pero al terminar enero, la cifra cae a 64 por ciento; en marzo disminuye al 50 por ciento y en los primeros seis meses sólo se mantiene el 46 por ciento.
Al llegar a diciembre, ya es común registrar que sólo el 19 por ciento logra sus propósitos de Año Nuevo y la frustración no tarda en aparecer.
Para expertos en psicología es algo multifactorial que las presiones de Año Nuevo siempre están ahí por las expectativas que nos ponemos, pero en algunas ocasiones las expectativas pueden ser rígidas y normalmente lo que es rígido se rompe.
