Preocupa a científicos verdín en cenotes de Yucatán
La presencia de verdín en los cenotes de Yucatán preocupa mucho a investigadores, pero también a la comunidad por las implicaciones económicas, ambientales y sociales, indicó el biólogo Juan Manuel Arana Almazán, estudiante de Maestría en Ciencias del Agua, en la Unidad de Ciencias del Agua, del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY)
En su estudio de posgrado el investigador indicó que en la Península de Yucatán, en especial el estado de Yucatán, es común escuchar el término “verdín”, cuyo significado se refiere a los manchones de color verde oscuro o verde claro que se dan sobre superficies cuya exposición a la humedad es elevada.
Recordó que hace unos años, algunos periódicos de la región reportaron que varios colectivos mayas se levantaron para denunciar que, algunos cenotes aledaños a sus comunidades presentaban un estado inédito: ya no eran cristalinos como solían ser. Ahora se estaban poniendo verdes y algunos un poco más cafés
La denuncia señalaba principalmente “malas prácticas de corporativos pecuarios circundantes que descargaban sus aguas residuales mal tratadas a las aguas naturales”, pero quienes estudian estos ecosistemas acuáticos saben que es el resultado de un fenómeno conocido como eutrofización cultural, con el cual ocurre un enriquecimiento de nutrientes que superan por mucho a lo existente de forma natural en los cuerpos de agua, a causa de las actividades humanas, lo cual lleva a que los florecimientos de microalgas (Verdín) se mantengan durante más tiempo y sean más intensos.
“En casos extremos, advierte, los florecimientos son permanentes y el agua mantiene la coloración verde todo el tiempo”
Indicó que la creciente mancha urbana de las principales ciudades de la Península, es otro aspecto que también puede fomentar este fenómeno. Mérida y Valladolid en Yucatán, o bien, Cancún y Playa del Carmen en Quintana Roo, son ejemplos de grandes ciudades que están teniendo un crecimiento extraordinario, que se traduce en un incremento en la contaminación y aumento en las concentraciones de nutrientes en las aguas residuales, lo cual se refleja en los cuerpos de agua con estos notables crecimientos de microalgas al igual que aumentos en las concentraciones de otras sustancias perjudiciales para el medio ambiente.
“En el agua dulce, dijo, el grupo de microalgas que más ha llamado la atención durante las últimas décadas son las cianobacterias. Estas microalgas pueden dominar en los cenotes cuando las condiciones de la eutrofización se vuelven prolongadas durante mucho tiempo.
De esto, alertó, son dos cosas las que preocupan: 1) En determinadas circunstancias, especies de cianobacterias de los géneros Microcystis, Anabaena, Cylindrospermopsis, Pseudanabaena, entre otras, pueden producir unas sustancias químicas llamadas cianotoxinas, que tienen un efecto nocivo en la salud animal, (incluida la humana), principalmente en el sistema nervioso o en el hígado.
Estas condiciones eutróficas son irreversibles, a menos que se implementen actividades de remediación y restauración de estos cuerpos de agua. Aunque se ha reportado la presencia de estas especies de estos organismos en la península de Yucatán, los reportes de la presencia de estas sustancias apenas se están reconociendo en la región.
“Aún señalado este panorama, tampoco hay que ver a todos los organismos de este grupo con terror” comentó.
EDGAR MUÑOZ
